¡Combatiendo los streams falsos!

La industria musical enfrenta un problema persistente y endémico: el fraude en las reproducciones por streaming. Sin embargo, en 2024, las distribuidoras, los sellos discográficos y los DSP (servicios de streaming digital) están dando pasos prometedores para frenar las reproducciones falsas y proteger a los artistas legítimos. Mantente informado sobre todo lo relacionado con las reproducciones artificiales con esta publicación de blog y ayuda a combatir la actividad fraudulenta.

¿Qué es el Fraude en Streaming?

Spotify define una reproducción artificial (también conocida como reproducción fraudulenta, manipulada o falsa) como “una reproducción que no refleja la intención real de escuchar de un usuario”. La mayor parte del fraude en streaming se realiza mediante bots o granjas de clics que intentan parecer oyentes genuinos, mientras que en realidad solo reproducen canciones de artistas que han pagado por sus servicios.

Como uno de los líderes de la industria en la prevención del fraude en streaming, Spotify ha publicado extensos recursos sobre el tema y estamos orgullosos de ser miembros de su Programa de Socios Preferidos, donde trabajamos diligentemente junto a ellos para vigilar este comportamiento.

  • Para obtener una excelente explicación general sobre los peligros de este tipo de prácticas, comienza con el artículo de Spotify sobre “Todo lo que necesitas saber sobre las reproducciones artificiales”.
  • Después de eso, asegúrate de repasar cómo detectar y evitar cualquier “Servicio de Terceros que Garantice Reproducciones”.
  • Y si eres más de aprender de forma auditiva, sumérgete y escucha la serie de videos educativos de Spotify, “The Game Plan”, que profundiza en el tema de manera informativa y entretenida.

En colaboración con Spotify, nos aseguramos de que las personas que perpetúan este tipo de fraude rindan cuentas. Para ello, trabajamos para garantizar que ningún estafador que intente engañar a estos sistemas pueda recaudar fondos por sus esfuerzos y que su comportamiento perjudicial se mantenga fuera del ecosistema de Spotify en general. Cuando detectamos cuentas con comportamiento de reproducción artificial, las suspendemos y las penalizamos en la totalidad de sus infracciones.

Además de eso, nos aseguramos de que cuando detectamos a este tipo de estafadores, cualquier cargo por reproducción artificial que nos realicen Spotify u otros DSP por este tipo de comportamiento solo afecte a los artistas que distribuyen el contenido que está en violación, y de ninguna manera impacte a los artistas que no están rompiendo las reglas. Cuando encontramos contenido que infringe las normas y recibimos multas de Spotify a ONErpm, nos aseguramos de asumir el 100% del costo de estas penalizaciones. De esta manera, nos aseguramos de que nuestros artistas trabajadores no se vean afectados en absoluto por los sinvergüenzas que intentan aprovecharse de ellos.

El Impacto de las Reproducciones Artificiales

El fraude en streaming no se trata solo de artistas nuevos que buscan aumentar sus reproducciones a través de cualquier medio necesario. También hay una serie de razones mucho peores y nefastas para la propagación desenfrenada de reproducciones falsas. En particular, se sabe que las bandas criminales lavan dinero obtenido ilegalmente a través del streaming fraudulento. Al comprar reproducciones ficticias de artistas ficticios, los DSP les pagan a las bandas en efectivo limpio e imposible de rastrear. Convirtiendo dinero obtenido de cualquier cantidad de delitos en moneda utilizable.

Más allá de lo inmoral, la naturaleza generalizada del problema significa que hay una serie de empresas que ofrecen reproducciones artificiales disfrazadas de un servicio legítimo. Esto ha llevado a un aumento en los últimos años de artistas que emplean reproducciones artificiales por completo por accidente. Estos artistas creen que están pagando a una empresa legítima de marketing musical que les ayuda a promocionar su música, cuando en realidad la empresa solo está usando bots para aumentar las cifras de reproducciones.

El Daño Causado

Es difícil saber exactamente cuántas reproducciones en el ecosistema musical son fraudulentas, y algunos DSP y distribuidoras menos reputadas realmente eluden su deber de proteger a los artistas. Algunas estimaciones sitúan el impacto de esos fallos en hasta $2 mil millones en fraudes cada año. En el proceso, esos estafadores están robando a artistas legítimos. Los servicios de streaming determinan sus pagos de regalías en función de su pool total de ingresos y lo dividen en función de la cantidad de reproducciones en ese período de tiempo. Entonces, esas reproducciones falsas representan miles de millones de dólares en ingresos que de otro modo se dividirían entre artistas legítimos y que en cambio van a parar a los estafadores.

Además, los artistas que aumentan sus números con bots a menudo sufren daños duraderos en el algoritmo de su base de fans en un DSP, lo que dificulta establecer un seguimiento legítimo. Las reproducciones aleatorias dificultan que cualquier DSP determine quiénes son sus fans y qué tipo de música les gusta. Después de todo, los bots y las granjas de clics no suelen reproducir música de artistas más grandes que suenan como tú, sino que reproducen la música de otros artistas pequeños que pagaron por el mismo servicio de bots. Una forma segura de saber si un artista está pagando por reproducciones es verificar la sección “a los fans también les gusta”; si es toda música completamente no relacionada, esas reproducciones probablemente sean falsas. Esta es parte de la razón por la que Spotify ha implementado su nuevo umbral de 1,000 reproducciones antes de que los artistas puedan comenzar a ganar dinero, para que los estafadores ya no puedan pasar desapercibidos.

Y, por supuesto, la principal razón para evitar las reproducciones artificiales es que pueden hacer que tu música sea eliminada de los servicios de streaming y te pongan en la lista negra de tu distribuidor. La detección de reproducciones artificiales es cada vez más sofisticada y estamos totalmente enfocados en asegurarnos de que cualquiera que intente aprovechar las reproducciones artificiales sea detectado lo más rápido posible, prohibido y responsabilizado.

Cómo Protegerte

Para evitar que tu música sea robada por “artistas fantasma”, nunca publiques música con calidad de streaming en YouTube, SoundCloud o TikTok sin antes enviarla a un distribuidor de renombre como ONErpm. Los distribuidores almacenan metadatos y las “huellas digitales” de las canciones que evitarán que sean subidas a otros distribuidores por personajes malintencionados.

La otra forma de proteger tu música de los takedowns por reproducciones artificiales es evitar las empresas de promoción sospechosas que utilizan reproducciones de bots. Nunca pagues por ningún servicio de marketing o promoción que garantice una cierta cantidad de reproducciones, incluso si afirman que todas son reproducciones reales.

También es importante tener cuidado con las listas de reproducción de terceros a las que envías tu música, especialmente si tienes que pagar para ser incluido. Ten cuidado con las listas de reproducción extremadamente largas con más de 200 pistas y cualquier cosa con una mezcla de géneros realmente aleatoria. Las listas de reproducción que son completamente de artistas desconocidos o con nombres falsos también deben evitarse. Como regla simple: si no la escucharías, ¡no la envíes!

ONErpm es miembro de la Music Fights Fraud Alliance, un grupo de trabajo global de servicios de streaming, sellos discográficos y distribuidores dedicados a erradicar el fraude en streaming.

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